NO TEMAS AL MIEDO
Estoy
convencido que después de que leas este artículo, te harás preguntas cuyas
respuestas las buscarás hasta debajo de las piedras. Hace ya muchos años, el
lingüista Noam Chomsky elaboró una lista con las 10 estrategias de manipulación
de los ciudadanos, y los poderes
económicos a nivel mundial las siguen fielmente.
La
primera es la “estrategia de la distracción” que consiste en desviar la
atención de los ciudadanos de los problemas importantes y de las decisiones
tomadas por las élites económicas, mediante la técnica del diluvio. Esta
estrategia es indispensable para que la gente no piense, tenerles ocupados,
cautivos y que no les llame la atención lo realmente importante.
La
segunda es, “crear problemas y luego ofrecer soluciones”. No es la primera vez
que un Estado deja crecer la violencia urbana y hasta incluso organizar
atentados, a fin de que sean los propios ciudadanos los que reclamen leyes de
seguridad y políticas en perjuicio de las libertades. O también crear una
crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los
derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.
La
tercera estrategia es “la de la gradualidad”. Si quieres que una medida inaceptable,
se acepte, solo tienes que aplicarla gradualmente, poco a poco, sin prisas. El
neoliberalismo lo lleva practicando en todo el mundo desde los años 80 hasta el
día de hoy. ¿Qué significa esto, y cual es el objetivo? Estado mínimo,
privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios
mínimos; si todo esto se aplicase de una sola vez… la revolución estaría en
marcha.
La
cuarta estrategia es “la de diferir”. Si presentas una medida como dolorosa y
necesaria, pero dices que su aplicación será en el futuro, la población lo
acepta como un mal necesario. La masa, siempre tiene la tendencia a esperar
ingenuamente que todo irá mejor mañana y que el sacrificio puede ser evitado;
pero el objetivo ha sido alcanzado y es que cuando llegue el momento ser a
aceptada con resignación.
La
quinta estrategia es la de “dirigirse a la ciudadanía como criaturas de poca
edad”. Sabemos que la publicidad emplea el discurso, argumentos, personajes y
entonación totalmente infantiles, como si el espectador fuese una criatura de
corta edad. ¿Por qué? Si uno se dirige a una persona de corta edad, entonces en
razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una
respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico, como la de una
persona de 12 o menos años de edad.
La
sexta es “utilizar el aspecto emocional, mucho más que la reflexión”. Es una
técnica muy recurrida para impactar en la opinión pública y causar un corto
circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido crítico de los
individuos. La utilización del registro emocional permite abrir la puerta del
inconsciente para implantar o injertar ideas, deseo, miedos y temores u inducir
a comportamientos.
La
séptima estrategia es “mantener a los ciudadanos en la ignorancia y mediocridad”
La calidad de la educación que se imparte en las escuelas y universidades, debe
ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia
que planea entre las clases inferiores y las clases superiores sea y permanezca
imposibles de alcanzar para las clases inferiores.
La
octava estrategia es “estimular al pueblo a ser complaciente con la
mediocridad” promoviendo a todos que es moda ser estúpido, vulgar o inculto.
La
novena es, “reforzar la auto inculpabilidad”. Sin acción no hay revolución,
¿cómo se consigue esto?, pues haciendo creer al ciudadano que es solamente él
el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su
inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de
rebelarse contra el sistema económico, el individuo se auto desvalida y se
culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición
de su acción.
La
décima y última estrategia es “conocer a los individuos mejor que ellos mismos
se conocen”
Los
avances generados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los
conocimientos de los ciudadanos y aquellos poseídos y utilizados por las élites
dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada,
el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de
forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al
individuo común de lo que él se conoce a
sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un
control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los
individuos sobre sí mismos.
Napoleón Bonaparte
dijo que, es injusto que una generación sea comprometida por la precedente. Hay
que encontrar un medio que preserve a las venideras de la avaricia o inhabilidad
de las presentes.
www.elllugarínblogspot.com
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