sábado, 1 de octubre de 2011

Échale un vistazo con tranquilidad

                               OTRO VENDRÁ QUE BUENO ME HARÁ

Todo español (bien nacido) sabe el grado de protección social que hemos alcanzado entre todos en España. Ahora, todo el Estado del Bienestar se está tambaleando debido a la crisis que aún padecemos siendo necesario proteger a las personas que se encuentran en una situación más frágil y para con todo ello preservar el bien colectivo de la cohesión social.
Es necesario poner en valor los grandes hitos de la política social en todo el periodo democrático y es de justicia reconocer que casi todos los logros que se han conseguido ha sido gobernando el PSOE, aunque esto no le guste a mas de uno. 
La Ley General de Sanidad a la cual se incorporan seis millones de personas que estaban excluidos del sistema. La extensión del derecho a la Educación Pública y gratuita. La Ley de Integración Social de los Minusválidos, que inició el reconocimiento efectivo de derechos asistenciales, prestaciones económicas y fomento de su empleo, mas tarde completada por la  Ley de Igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad. La Ley de racionalización de las pensiones de jubilación e invalidez. La Ley de pensiones no contributivas que supuso un sustancial avance fundamental para la protección de nuestros mayores, de la cual se benefician más de 450.000 personas. El Pacto de Toledo, la Ley de consolidación y racionalización de la Seguridad Social hizo que nos aproximásemos al llamado modelo social europeo.
Todos sabemos que en el año 1980 nuestro País destinaba un 14% del PIB a los tres pilares clásicos del Estado del Bienestar como son la Educación, Sanidad y Pensiones. En el año 2010 se ha destinado el 21 % de nuestro PIB casi el triple en términos reales que hace treinta años.
No es ninguna estupidez el título de esta opinión, se podrá estar de acuerdo o no pero desde mi punto de vista debemos de pensar muy detenidamente a quién le damos las riendas de esta, nuestra España.
Yo me niego (pero acataré el resultado)  a darle el timón de esta Nación a un partido que después de más de treinta años de democracia aún no ha rechazado la dictadura franquista ni condenado sus atrocidades.
No voy a permitir que con mi voto que se tire por tierra el avance en el incremento de las pensiones mínimas con cónyuge a cargo que desde el 2004 haya sido de un 27%. El salario mínimo interprofesional que era de 460 euros ahora esta en 641 euros y no permitiré (democráticamente) que el dinero destinado a la educación se desvíe a la enseñanza privada.
El dinero de todos los españoles que ha sido destinado a la educación es el 5 % del producto interior bruto. Los beneficiados han sido 1.700.000 estudiantes con becas en nuestro país y ha sido un dinero muy bien destinado por el futuro de nuestros hijos.
Se ha completado la cobertura pública en la educación de 3 a 5 años y en colaboración con las comunidades autónomas programas como el Educa3 creándose más de 50.000 plazas. Se han facilitado más de 580.000 ordenadores portátiles dentro del programa Educa 2.0  y se ha formado en el uso de las TIC a casi 140.000 profesores.
No podemos entregar estos logros a un partido cuyo lema es “cuanto peor mejor”,  que lleva cuatro años pidiendo elecciones anticipadas y quién no ha aportado ninguna idea, sugerencia o propuesta para paliar esta crisis que nos azota y de la cual no somos los españoles de a pie los culpables. Tampoco es baladí y es hasta repugnante que el partido que es alternativa de gobierno rechace la Ley de la Memoria Histórica.
Para no cansarte estimado lector y con el solo objetivo de decirte sencillamente la verdad, dejaremos para el próximo mes las cuestiones referidas al permiso de Paternidad, la ley de Maternidad, la ley de Igualdad, la ley de Dependencia, el modelo de  normalización de la inmigración, el cheque bebé, los 400 euros y muchas cosas más.

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