REGRESO AL PASADO, MAL FUTURO
La huelga es la suspensión de la actividad laboral por parte de los trabajadores con el fin de reivindicar mejoras en las condiciones de trabajo. Según la Organización Internacional del Trabajo, es uno de los medios legítimos fundamentales de que disponen los ciudadanos y específicamente los trabajadores (a través del movimiento sindical y las organizaciones sindicales) para la promoción y defensa de sus intereses económicos y sociales.
Se dice que la primera huelga tuvo lugar en tiempos del Faraón Ramsés III en el Antiguo Egipto, en el año 1.166 a. C. Pero ¿Cuál fue el motivo o motivos que llevaron a los obreros a iniciar dicha huelga? Pues sencillamente la corrupción y el impago de salarios que eran pan, cerveza, dátiles, verduras y agua potable.
Los albañiles, canteros, pintores, tallistas de relieve y escultores, iniciaron una serie de acciones tendentes a hacer llegar al Faraón sus reivindicaciones en escritos denunciando que los alimentos les llegaban en malas condiciones y mermados en calidad y cantidad.
En aquella época se trabajaba solo para comer y vivir. El salario de un día por trabajador era de 10 hogazas de pan y una medida de cerveza. Un artesano de mayor categoría podía llegar a las 500 hogazas de pan. Los capataces y los escribas recibían 72 sacos de cereales al mes, y el resto de los trabajadores 52 sacos.
El día 10 del año 29, segundo mes de la segunda estación, los trabajadores cruzaron los cinco muros de la necrópolis gritando ¡Tenemos hambre!(…) y se sentaron de espaldas al templo de Tutmosis III.
Cuando este artículo vea la luz se habrá consumado la Huelga General del 29 de Marzo en toda España contra la Reforma Laboral que ha aprobado el Gobierno de España. La ausencia de diálogo y la imposición de medidas han roto el modelo de convivencia democrática en nuestro país.
La desarticulación de la sanidad pública, la educación, la atención a la dependencia, las prestaciones de desempleo son materias que el Gobierno quiere dejar en la mínima expresión con la excusa de la rebaja del déficit.
Llegados a este punto los trabajadores del antiguo Egipto se pusieron de espalda al templo de Tutmosis III. Mientras en España, muchos años después la Jerarquía de Iglesia Católica le ha dado la espalda a los trabajadores, sí a esos que hacen posible el sostenimiento de sus curas, obispos, arzobispos, cardenales etc. etc.
Nuevamente la Jerarquía de la Iglesia Española se ha puesto del lado de los poderosos, del capital, de los empresarios. Digo esto porque ha ordenado no darle publicidad a un documento donde se criticaba la Reforma Laboral del Gobierno de España ¿por qué, y a cambio de qué? Si ha esto le añadimos la campaña de la Iglesia para captar adeptos ofreciéndoles un contrato fijo me da que pensar que el Gobierno le ha dado el poder para actuar como una agencia privada de colocación.
Se ha roto el consenso que ha funcionado es España durante más de 30 años y que ha garantizado la paz social. Los obreros verán mermados sus derechos puestos a disposición de empresarios sin escrúpulos cuyo interés será solo las ganancias rápidas y no invertirá ni un euro en seguridad y la salud para los obreros, en definitiva la mayoría de los empresarios estarán muy a gusto en esta jungla laboral en la que gracias a este Gobierno estaremos a partir de ahora.
“ Los trabajadores traspasaron los muros de la Necrópolis (se pusieron en huelga) diciendo: Tenemos hambre, han pasado 18 días de este mes… hemos venido aquí empujados por la sed y el hambre; no tenemos vestidos, ni grasa, ni pescado, ni legumbres. Escriban esto al Faraón, nuestro buen señor y al Visir nuestro jefe, que nos den nuestro sustento… Estimado lector ¿nos sucederá lo mismo a nosotros?